A menudo, ponemos especial atención en cuidar la piel del rostro, lo hidratamos, lo protegemos, es normal, como se suele decir “la cara es el espejo del alma”. Pero no prestamos tanta atención al cuidado de la piel de nuestro cuerpo, como lo cubrimos con ropa pensamos que ya está protegido. ¿Y el cabello? ¿Lo cuidamos como debemos?.
Seré sincera, antes no cuidaba como debía la piel del cuerpo ni el cabello. Me duchaba con un gel y un champú cualquiera, me secaba, el pelo lo recogía en una coleta y andando. La excusa de siempre: tengo prisa. Hasta que descubrí productos que al tiempo que limpian la piel del cuerpo y el cabello, lo cuidan. Y lo mismo me pasaba con la hidratación, por prisa no usaba nada y el resultado era la piel tirante y el pelo reseco. Pero ya no me pasa, ahora uso un gel que cuida mi piel y la hidrato con una crema muy fácil de aplicar y para el cabello hago lo mismo, aplico un champú que al tiempo que lava, fortalece mi pelo y uso acondicionador. ¿Y el resultado? Tengo la piel y el cabello genial, suave e hidratado. Te cuento por qué es necesario cuidar la piel del cuerpo y el cabello. Pero no solo por estética debemos cuidar nuestra piel y el cabello, también por salud. Te cuento por qué.
Beneficios:
¿Sabías que la piel es el órgano del cuerpo más extenso? ¿Y que su función es protegernos de factores externos como sustancias químicas o bacterias? Por eso, para que siga cumpliendo su función protectora, debemos cuidarla e hidratarla para que esté en perfectas condiciones.
Y el cabello, tal vez pienses que lo tenemos para hacernos moños o pasarnos la plancha. Pues no, también cumple una función, la de proteger nuestro cuero cabelludo del sol y el frío, para amortiguar golpes, e incluso, para dificultar la picadura de insectos.
Yo no lo sabía y desde que me enteré, ya no utilizo cualquier producto, ahora uso productos que me garantizan una limpieza en profundidad y cuidadosos con mi cuerpo y el medio ambiente porque son de origen botánico. Estos son los productos que uso a diario.